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domingo, 14 de diciembre de 2014

Lo de dentro (I)


Mantente a una distancia prudencial, levanta un muro, estate alerta. 
Nada de emociones extremas, no tengas ilusiones, no hagas muchos planes, no esperes demasiado.
Quiere lo justo, en esa medida en la que ni duele ni da felicidad.
No derroches sentimientos, ni positivos, ni negativos.  
Sé gris hasta que te mueras por dentro y ya estarás preparado para la vida moderna.

2 comentarios:

  1. Es curioso que, mientras leía esto, y no había llegado hasta el final con eso de "la vida moderna" pensaba que estabas exponiendo fundamentos del taoísmo con el que mantiene una evidente similitud el conjunto de tus reflexiones. Tal vez no sea tan descabellada esta distancia emocional para vivir. El oriente habla de ella. Hay libros importantes en la historia de la humanidad. Uno es el Tao te king de Lao Tse y otro es el Bagavad Ghita que está en el interior del Mahabbarata. Creo que ellos te abrirían caminos fértiles de pensamiento porque tus intuiciones no son descabelladas pero lo que no necesariamente tienen un desenlace negativo. Quizás haya que estar muerto para vivir con toda la intensidad del mundo. Eso me decían cuando hacía zazén.

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  2. Nunca sé por dónde vas a salir en tus comentario, por eso es genial tenerte entre mis lectores. Es enriquecedor. Lo cierto es que sé poco de la cultura oriental, y no pensaba en ello cuando lo escribí, pero me has despertado la curiosidad y no dudaré en acercarme a ella.

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